A Miquel
Lo mejor y lo peor de dejar entrar un ángel en casa es que después no hay manera de deshacerse de sus plumas.
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Soy tan pequeña que miro y no concibo cómo me habitas. ------ Sent xicoteta i mirant-me, no esbrine com ets dintre meu.
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Un llar d'estels reflectint-se a l'aigua donen vida a la mar. Corrents fosques bressolen l'ànima oberta al so de les ones. Les c...
3 comentarios:
Pues yo tengo dos de estos en casa..., y un Gabriel, que es otro de los suyos, ya ves hoy qué día de alados.
te leo aunque nunca te diga nada.
Un abrazo.
Muchas gracias, aunque no me digas nada. Si me lees, ya me ayudas a seguir escribiendo con tu vuelo entre mis páginas... Ya sabes que los ángeles siempre dejan rastro en su vuelo ;-)
Oh, qué amable.
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